CENTRO DE ESTUDIO DE LA VID
ARTÍCULO DE EXTENSIÓN, AÑO 2005
UNIVERSIDAD DE CHILE
Director: Dr. sc. agr. RODRIGO CALLEJAS R.
Sub Director: Agr. Ph D. CLAUDIO PASTENES V.
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CEVID. Centro de Estudio de la Vid, Facultad de Ciencias Agronómicas, Universidad de Chile.
Santa Rosa 11315, La Pintana, Santiago, Chile; Casilla 1004, Santiago. F:56-2-9785727
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Figura 1. Raíces de vid, “Sultanina”, abril 2004,
III Región, Copiapó.
En forma particular y bajo las condiciones de la III Región del país, las raíces no detienen en su totalidad el crecimiento
invernal. En pleno invierno se han observado notorios indicios de crecimiento de raíces, los cuales se hacen más evidentes al
inicio y término de esta estación del año. Respecto a esto último, en el mes de agosto comienza a aumentar la tasa de
crecimiento del sistema radical, en paralelo con el inicio de brotación de los parronales en esa zona del país (Callejas, 2005;
Callejas
et al
., 2006).
Se ha detectado que durante todo el invierno la temperatura del suelo en esa zona se eleva siempre por sobre los 6°C, umbral
mínimo de crecimiento determinado para las raíces de la vid. Sin embargo, esta condición y la falta de consistencia en el
crecimiento de todas las variedades y sitios de estudio, permite concluir que hay otros factores que afectan en forma
importante el crecimiento de las raíces en el suelo, como puede ser el estatus nutricional, así como la humedad de suelo, tanto
por deficiencia como por exceso.
La temperatura también influye sobre las poblaciones de nematodos fitoparásitos; sin embargo, existen enormes diferencias
entre especies (Magunacelaya y Dagnino, 1999 ). Las poblaciones de
Xiphinema index
fluctúan a lo largo del año y pueden
ser correlacionadas con la temperatura del suelo. Bajas temperaturas de suelo en invierno entre 2 a 6 ºC, corresponden a bajas
poblaciones de
Xiphinema index.
Por su parte, moderadas temperaturas de suelo, entre 10 a 18 ºC, preceden a aumentos en
las poblaciones de esta especie (Feil
et al.
, 1997; Lamberti
et al.
, 1990). Coiro
et al.
(1990) señalan que la temperatura basal
de esta especie corresponde a 14 º C.
Por su parte, la literatura señala que
Meloidogyne incognita
presenta un umbral de actividad de 18ºC, temperatura sobre la
cual penetra raíces de trigo, sin embargo, puede desarrollarse y reproducirse a temperaturas cercanas a los 10 °C (Roberts
et
al.,
1981; Johnson y Motsinger, 1990). En cambio,
Pratylenchus penetrans
se reproduce sobre un amplio rango de
temperaturas (Mizukubo y Adachi, 1997).
Finalmente, hay que señalar que el tiempo de actividad de los productos nematicidas en el suelo es bastante variable,
dependiendo del tipo de producto que se trate y las condiciones en que éste es utilizado. Al respecto, se puede mencionar que,
entre otros, Mocap
®
tiene una vida media de 43 días (Bayer, 2002a), Furadan
®
entre 45 a 60 días (FMC, sin año), Nemacur
®
120 días (Bayer, 2002b).
¿Se está protegiendo eficientemente el nuevo crecimiento de raíces contra el ataque de nematodos?
Proteger el sistema radical de las vides es fundamental, dada la necesidad de permitir que las nuevas raíces crezcan sin las
limitaciones que significa el ataque de los nematodos. De acuerdo a la literatura, es sabido que el crecimientos de raíces
puede contribuir al aumento en el número de estos parásitos, debido al aumento del recurso alimenticio (Feil
et al.
, 1997;
