LA RAÍZ DEL PROBLEMA, del bajo potencial productivo de los parrones de uva de mesa, ESTÁ EN LA RAÍZ - page 4

CENTRO DE ESTUDIO DE LA VID
ARTÍCULO DE EXTENSIÓN, AÑO 2004
UNIVERSIDAD DE CHILE
Director: Dr. sc. agr. RODRIGO CALLEJAS R.
Sub Director: Agr. Ph D. CLAUDIO PASTENES V.
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CEVID. Centro de Estudio de la Vid, Facultad de Ciencias Agronómicas, Universidad de Chile.
Santa Rosa 11315, La Pintana, Santiago, Chile; Casilla 1004, Santiago. F:56-2-9785727
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Figura 2. Perfil de suelo con sector de la entre hilera, con bajo e inadecuado contenido
de agua para las raíces. Evaluación realizada con instrumento WET Sensor.
El déficit hídrico detectado por las raíces, que en muchos caso puede llevar a la muerte de ellas, induce importantes cambios
en los niveles hormonales, aumentando de manera significativa los niveles de ácido abcísico (ABA) en la planta, alcanzando
valores 40 veces superior respecto de plantas bien hidratadas (Barceló, 1990). Paralelamente, esta situación de estrés
promueve la disminución de la concentración de citoquininas en el xilema y por ende la dotación de ella en la parte aérea,
afectando un sin número de procesos en la planta. Lo más importante de todas estas reacciones es que afectan negativamente
el crecimiento de la parte aérea y reduce el crecimiento de las bayas, impactando directamente sobre el potencial productivo
de los parrones.
Suelos saturados y sus efectos sobre el crecimiento de las raíces
En la vid, la mayor parte de las raíces se presentan en el primer metro, aunque algunas raíces individuales pueden penetrar a
profundidades de seis metros o más (Van Huyssteen, 1988). En la parte superior de esta zona se concentran las raíces
laterales finas, comprendiendo la mayor parte de la superficie absorbente (Richards, 1983).
Se ha podido detectar, a través de evaluaciones a nivel de campo, que el uso de largos tiempos de riego (empleo de
importantes cargas de aguas) durante varias temporadas, con el objetivo de llegar con este elemento a sectores que presentan
déficit hídrico, tales como la entre hilera (
X2, Figura 1 y
Figura 2
) y sectores más profundos del suelos con importantes
cambios texturales (
X3, X4 y X5; Figura 1
), generan un sector aledaño al cuello de la planta permanente mente saturado de
aproximadamente 35 cm de diámetro (
Figura 3
), donde las raíces finas absorbente tienden a desaparecer (
Figura 4
). Esta
situación es menos evidente en suelos de texturas gruesas.
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